La alveolitis, también conocida como alveolitis seca, es una complicación dolorosa que puede surgir después de una extracción dental, especialmente en el caso de las muelas del juicio. Ocurre cuando el coágulo de sangre que se forma en el alveolo (la cavidad ósea donde estaba el diente) se desintegra o no se desarrolla adecuadamente, dejando el hueso y las terminaciones nerviosas expuestos.
Causas principales de la alveolitis
Puede desarrollarse debido a:
Falta de coágulo sanguíneo: por disolución prematura o ausencia del coágulo.
Extracciones complicadas: como en el caso de muelas del juicio impactadas.
Hábitos como fumar: la acción de fumar puede interferir en el proceso de cicatrización.
Higiene oral deficiente: que aumenta el riesgo de infección en la zona afectada.
Uso de anticonceptivos orales: los niveles elevados de estrógenos pueden afectar el proceso de cicatrización.
Síntomas de la alveolitis
Los principales signos y síntomas incluyen:
-Dolor intenso y persistente en la zona de la extracción que puede irradiarse a la oreja, ojo o cuello.
-Mal aliento o sabor desagradable en la boca.
-Ausencia visible de coágulo sanguíneo en el alveolo.
-Inflamación leve o moderada de los tejidos circundantes.
Si experimentas alguno de estos síntomas tras una extracción dental, es fundamental buscar atención odontológica de inmediato.
Tratamiento
El tratamiento de la alveolitis tiene como objetivo aliviar el dolor y promover la cicatrización. Los pasos habituales incluyen:
Limpieza del alveolo: el dentista retirará restos de alimentos o tejidos necrosados para evitar infecciones.
Colocación de un medicamento en el alveolo: generalmente, se aplica un gel o gasa impregnada con medicamentos para aliviar el dolor y proteger la zona.
Prescripción de analgésicos y antiinflamatorios: para controlar el dolor y reducir la inflamación.
Instrucciones de cuidado en casa: mantener una buena higiene oral y evitar hábitos perjudiciales como fumar.
Prevención de la alveolitis
Para minimizar el riesgo de desarrollar alveolitis después de una extracción dental, es importante:
Seguir las instrucciones postoperatorias de tu dentista al pie de la letra.
Evitar fumar o usar popotes durante al menos 72 horas tras la extracción.
Mantener una higiene oral adecuada sin perturbar la zona de la extracción.
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